¿Existe LegalTech buena y mala?

Desde 2014, las empresas LegalTech han ido en aumento con Tasa de crecimiento del 20% en Europa según la revista Forbes. Francia ocupa una buena posición en este ranking, aunque no llega a Estados Unidos, donde el mercado jurídico se ha desarrollado significativamente en los últimos años.

Hoy en Francia, la alianza entre derecho y tecnología se aplica más a la redacción de actos y documentos jurídicos. Pero otras LegalTechs trabajan en la provisión de herramientas profesionales especializadas para profesionales, protección de datos, accesibilidad, uso de inteligencia artificial, accesibilidad y protección de datos, etc.

¡No existe la mala LegalTech!

¿De qué hablamos exactamente cuando hablamos de LegalTech? El término surgió en la década de 2000 y agrupa a todas las empresas que utilizan la tecnología para ofrecer servicios legales.

En definitiva, lo que debemos entender es que LegalTech no tiene en absoluto la ambición de sustituir a los abogados por tecnología o máquinas. Simplemente desea aportar conocimientos en el ámbito tecnológico y ponerlos al servicio de los profesionales del Derecho y de los litigantes. De esta forma, estas empresas se posicionan como complemento de las actividades jurídicas y de apoyo a los abogados.

Aquí no está en juego ninguna uberización del derecho, es decir, ninguna desaparición de un viejo modelo para sustituirlo por otro.

Actualmente, el juicio en su contra se basa principalmente en esta pregunta: ¿hay que ser un profesional del Derecho para tener la legitimación necesaria para fundar una LegalTech?

Pero, cuando entendemos que LegalTech es ante todo una oferta de servicios jurídicos apoyados en tecnología y no asesoramiento jurídico, esta pregunta ya no tiene sentido.

Querer una regulación amplia de LegalTech como las profesiones jurídicas sería inútil y contraproducente. Incluso si se encuentran en el límite, las LegalTechs francesas pueden ofrecer perfectamente servicios respetando las reglas básicas de la ética.

Por ejemplo, si tomamos el caso de los modelos jurídicos vendidos en internet, estos contribuyen a la democratización del acceso al derecho. Pero es obvio que nunca podrán sustituir el asesoramiento jurídico personalizado. Si la información proporcionada por los actores del sector sobre este tema es clara e inequívoca, entonces todos podrán entenderla.

 

Lo que LegalTech puede aportarte

LegalTech pretende ser “transformador” para el abogado. Como LegalTech, Jarvis Legal encaja en esta perspectiva al ofrecer servicios y características que se basan en la tecnología para facilitar el trabajo del abogado.

LegalTech contiene un fuerte valor agregado que puede ayudar a que su firma crezca al permitir que el abogado se concentre en lo esencial de su profesión y su valor agregado.

Es una respuesta a problemas reales como la gestión del tiempo y las tareas que consumen mucho tiempo. Por ejemplo, al automatizar tareas repetitivas, puede ahorrarle un tiempo considerable al permitirle concentrarse en su trabajo.

Como plataforma API en línea segura, Jarvis elimina la molestia de administrar su práctica. ella trae a todos Los aspectos positivos del LegalTech directamente en su oficina. Desde la gestión de facturas y archivos hasta el seguimiento del tiempo y la integración de todo su software en una única plataforma, tendrá todo fácilmente al alcance de su mano.

En definitiva, el conocimiento profesional aportado por profesionales de otros sectores puede tener un efecto facilitador real en el ejercicio de las profesiones jurídicas.

 

La transformación digital afecta a todas las profesiones y aporta su cuota de innovación y ahorro de tiempo y productividad. El mundo de los abogados ciertamente se beneficiará si aprovecha estos nuevos avances que hace posible la tecnología. Dentro de unos años, habrá quienes tomaron el tren... ¡Y los demás se quedaron en el andén!